El representante del gremio FOECYT, Víctor Aballay informó que trabajaron con la central desde Buenos Aires para evitar la suspensión completa del servicio, por lo que se acordó brindar una atención reducida después de las 10 de la mañana.

En primera instancia se había informado que el Correo Argentino iba a permanecer cerrado hasta el 4 de noviembre por un caso positivo de un empleado del área comercial. Entre las medidas, se sanitizó todo el edificio y se aisló a todo el personal de la misma área.  

Sin embargo, Aballay explicó que estuvieron trabajando para ver las posibilidades de mantener el servicio, y al respecto dijo que "logramos que desde Buenos Aires envíen las claves para los nuevos operarios y van a poner a prueba este jueves para ver si activan el sistema y continuar la atención hasta que se reincorpore el resto del personal".

El trabajador infectado informó que por parte de su familia 3 personas habían dado positivo y él había estado trabajando pero cuando se enteraron, dejó de ir y al hacerse el hisopado también le dio positivo. Ya hace una semana que no asiste al lugar de trabajo.

En ese contexto, Aballay remarcó que la ART se hizo cargo de inmediato y se aplicaron todas las normas de seguridad y protocolos, para resguardo y seguridad del resto de los empleados.

Por otra parte, el gremialista se refirió a la necesidad de una nueva sucursal y los reclamos que surgen desde los trabajadores: "en una reunión por zoom con los demás delegados, son muy similares las problemáticas en todas las provincias, estamos necesitando que funcione un directorio y que el correo funcione con el valor que se merece, necesitamos otra boca de expendio, una sucursal para evitar este tipo de inconvenientes" comentó.